Camila Vallejo y Jose Vicente Rangel: generaciones distintas, un mismo fraude.

El otro día la afamada lideresa del estudiantado chileno, ese que reclama por una educación "gratis y de calidad", viajo a Cuba a ver a Fidel, peregrinación obligatoria de cualquier wanna-be líder de la izquierda arcaica de nuestro continente.  Yoani Sanchez, que sí es una resistente de verdad en condiciones que la pobre Camila no puede ni imaginarse en su glamoroso Santiago con un Internet y Twitter velocícimos para organizar protestas, le pidió visita, para que conozca el otro lado de la moneda en Cuba donde si la educación es gratis hay serias dudas en cuanto a la calidad.

Pues bien, la Camila no se dio ni por enterada y no iba a perderse babearse frente al las imágenes ya momificadas de la idolatría castrista.  Nada menos que el propio Silvio Rodriguez, otro afamado defensor de la libertad, salio a defender la postura insostenible de la lidereza estudiantil.  Aparentemente en Chile ya se están dando cuenta y a pesar de todo su glamour y protagonismo no logró ganar las elecciones estudiantiles allá.  Aunque siempre existen apologistas que se la hechan de críticos inteligentes diciendo que la dichosa vista fue y no fue.

En fin, es una pena que una mujer con potencial como Vallejo pretenda minimizar los males de Cuba para maximizar los de Chile que ha pesar de sus claroscuros es hoy en día uno de los países mas prometedores de nuestro continente.  A 23 años y ya un fraude de la izquierda arqueológica.

Por lo menos Jose Vicente Rangel en Venezuela es un fraude cónsono con eso de la edad ideo-arqueológica del aprendiz a dictatorzuelo que el defiende.  El problema de JVR son los cagatintas que reportan sus profundidades investigacionistas (lo bueno del chavismo es que uno puede inventar cualquier palabra).  Fíjense que hasta este humilde bloggero aparece en un articulo de Aporrea firmado por la AVN reportando sobre alguna presentación televisiva del Mike Wallace criollo (Not!)

Si bien han detectado que escribo mas frecuentemente en inglés que en cristiano (o sea, exploraron el blog), no cavilan en decir que soy parte del elenco electoral extranjero de Capriles a pesar de mis frecuentes reservas con dicho candidato expresadas durante las primarias.  No hay matices.  O sea, sí, ojearon pero si leyeron no entendieron.

Me halagan también con ser una inspiración a Stratford en eso de que me robaron la idea de chavismo=peronismo aunque ni ese merito tengo (lo tiene el constitucionalista Alberto Franceschi que fue el primero en mencionar el "balcón peronista de Miraflores" allá en el lejano 99-00).

No tienen que leerse todo el mamotreto de AVN/Aporrea, basta con el párrafo "9" donde ademas de confundir "bloque" con "blog" califican a este social demócrata liberal y defensor de derechos de gays y féminas como un ultraderechista furibundo.

¿Porque será que cualquiera que no se comparte 100% los lineamientos de Fidel y sus secuaces uno tiene que ser un ultraderechista furibundo, con todo aspaviento?  ¿Por que no nos ayudan y definen quien está entre ellos y los ultraderechisitas porque esa definición no la conozco ni se de ella?  Pero me temo que para ellos no hay nadie en el medio.

El fraude intelectual sigue a estas alturas a pesar de todas la evidencias aquí o en La Habana.  Es que todavía a estas alturas hay quienes creen que funcionará alguna vez. Bueno, si funciona para esos ávidos de carreras políticas exprés como el Hugo o la Camila que siempre logran conseguir suficiente resentidos para llegar a algo.